miércoles, 10 de marzo de 2010

Mi obra máxima

Comenzaré diciendo que soy el autor de la novela más magnífica de todos los tiempos; destacable es mi osadía al confesarlo, no cualquiera hace tamaña confidencia sin tener prueba alguna de ello; es cierto no tengo cómo demostrarlo, siquiera el recuerdo de un fragmento errante, nada.
Tendrán que consolarse con saber que aquella historia de amor, desamor, intramor o de lo que haya sido, existió.
La soñé una vez, de eso estoy seguro; recuerdo haber despertado con el inmenso placer del labor realizado, “esto debe haber sentido Miguel Ángel” me dije (claro, en esos tiempos sobresalir era mas sencillo, a algunos se los recuerda por haber descubierto que las manzanas caen hacia abajo). Pero no pude escribirla, la había olvidado completamente.
Mi desamparo era total, muy probablemente había dejado escurrir entre mis pensamientos la obra mas sublime de mi generación; no entraré en la demagogia de decir que mi angustia radicaba en el hecho de haber privado al mundo de un regocijo semejante, lo que verdaderamente me atormentaba era que me habían despojado de un reconocimiento justo, juro que no soy vanidoso, pero lo que es justo es justo.
Ustedes por lo pronto deberían saborear aquello que fue, y si alguna vez se cruzan conmigo espero recibir al menos un gesto de gratitud

6 comentarios:

  1. Hay mundos tan fantásticos en sueños. Mucho más fantásticos que cuando llegamos a recordarlos y los escribimos. Los leemos, y, mientras dormíamos eran realmente mucho mejores.
    Me gusta mucho cómo escribís. Volveré!
    Gracias por pasar por mis Fragmentos.
    Saludos!

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  2. jajaja muy bueno vaya lástima que haya olvidado loque te iba a escribir aquí

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  3. Felicidades por tan tan ignota joyita. Alguna olvidada tarde la hojeé en una pieza que olvide, y concluí cosas que son no podré repetir porque nada queda de los silogismos que formé, y la compañera a cuyas piernas volví después se ha perdido y no se como la conocí ni porque tenía tu libro entre mis manos ni que fue de ella ni que cara tenía ni por que cosas peleabamos o si cocinaba bien el charquicán.

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  5. Repito me gusta mucho como escribis, y seguramente te voy a seguir leyendo.

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